domingo, 22 de enero de 2012

martes, 10 de enero de 2012

retiro

by blue


por 10 días, hasta el 19 de enero, el blog se retira -literalmente- al silencio.



no se ve nada.
no se oye nada.
y sin embargo, algo resplandece en el silencio...

sábado, 7 de enero de 2012

sorbetto di arancia

da francesca


38° en buenos aires.
¿qué decir?
sorbetto di arancia!!




240 ml de leche
240 ml de jugo de naranja
150 gr de azúcar

mezclar bien todo, hasta que se disuelva el azúcar

congelar

disfrutar

...

alex barker, 500 gelati e sorbetti, ed. il castello, italia, 2009



martes, 3 de enero de 2012

cómo regar

margarita´s


este es el pronóstico para esta semana de pleno verano, en buenos aires:




con un tiempo así, no hay jardín que aguante. por eso, aquí va un pequeño consejo.
hace unas semanas, delegué el riego de mi jardín en una de mis hijas, pensando que regar era así de fácil. y en eso recibí un pedido de auxilio que me decía: "pero, ¿cómo se riega?"


a mí me parecía que era obvio: abrís la canilla y regás. pero por los resultados que vi a los pocos días, me di cuenta que por ahí, una pequeña aclaración, no estaría de más.


esto es lo que NO hay que hacer:



la tentación es regar el follaje de la planta, porque como hace calor nosotros nos refrescaríamos mojándonos un poco. eso nos alivia mucho. 
entonces, le mojamos las hojas, el agua hace que se vean brillosas, frescas, lindas, y nos quedamos chochos.
y así la planta se deshidrata, porque se muere de sed.

la planta absorbe el agua por sus raíces. y esa agua que queda en el follaje, con el calor se evapora rápidamente y nunca llega a la tierra.
así, los resultados pueden llegar a ser bastante catastróficos.

en cambio, esta sería la forma más adecuada de regar:


con manguera, regadera, regador, botella, vasito... lo que haya, lo que necesita la planta es que le mojemos la tierra. eso es para ella como para nosotros tomarnos un vaso de agua. ahhhhh!!!!!! qué refrescante!!

esto vale para macetas, plantas, árboles, jardín en general.
y ahora, a regar se ha dicho!!

lunes, 2 de enero de 2012

agenda nueva

cuenta cynthia






tengo agenda nueva. toda nuevita, impecable.
superado el shock por el disparate que pagué por algo tan mínimo, flaquito, para poder llevar en la cartera, lo que siento ahora es una especie de felicidad. casi me siento poseedora del tiempo.


porque tengo en mis manos una agenda en blanco. como si todo el 2012 fuera mío. como si yo fuera su dueña absoluta.


sí, una agenda en blanco. sin rastros de stress, agotamiento, desborde. sin las decenas de trazos multicolores de lápiz, birome, tinta, marcador, y si me descuido, por ahí hasta tiza. cualquier cosa que escribiera. a veces hasta con los dedos, apretando una birome que ya no quería, o un marcador con tinta seca.


rayones, tachaduras, flechitas de acá para allá, de allá para acá...
teléfonos, nombres, datos de vaya a saber quién, o qué...


en la contratapa, de un lado los números de documento y obra social de toda la familia, datos imprescindibles para caminar por la vida. del otro, las instrucciones para endosar un cheque. porque sí, hay cosas que no se me registran, números que nunca se me graban. agujeros negros en mi cerebro.


había una vez cuando, al comienzo del año, procuraba anotar todas las direcciones prolijitas. los últimos años, en cambio, las mismas direcciones vienen con caligrafía en franco deterioro. porque no tengo tiempo. porque corro, corro, corro. porque estoy tan apuradísima.


y ahora esta sensación de paz, tranquilidad. tantas hojas en blanco.
tantas oportunidades abiertas.
tantos proyectos por nacer.
¡qué lindo es un año nuevo!

sábado, 31 de diciembre de 2011

Última hora

Desde Galilea

Ha llegado la última hora (1 Juan 2, 18). Es el último día del año.
¿Una convención? ¿Un invento? No tanto.
Porque marca un nuevo ciclo: de nuevo los árboles dan sus frutos de verano, después caerán sus hojas en el otoño, se pelarán en el invierno, y brotarán gozosos otra vez en primavera.
Y así todo.

Descansamos en las vacaciones de verano. El comienzo de las clases con la llegada del otoño va imponiendo otro ritmo. Tantas cosas también comienzan. Cursos, gimnasias, campeonatos, torneos, temporadas culturales... Y así nos vamos cansando con las actividades del año.

Y hay cosas que siguen sus propios ritmos, independientes del calendario. Los embarazos duran 9 meses, no importa en qué estación empezaron. Las noticias -buenas y no tanto- llegan cuando quieren, sea la época que sea. Conocemos personas, tejemos vínculos, que se afianzan, deterioran, consolidan, en cualquier momento.
Las cosas suceden cuando suceden.

Sin embargo, hay una generalidad que empieza con el calendario y termina con él.
O tal vez nosotros las hemos orientado a caminar juntas.

Llega el último día. Hay sol, hace calor. Mañana va a ser igual. Pero hoy es el año 2011 y mañana va a ser el 2012. Y con eso, cambia un mundo. El "modelo 2011" con el tiempo va a ser mucho más viejo que el "modelo 2012". Por el contrario, la "cosecha 2011" con el tiempo tendrá un sabor más añejo que la
 "cosecha 2012".

¿Es que el tiempo resta valor? ¿O es que el tiempo agrega valor?
Tal vez, cuestión de calidad.
Tal vez, cuestión de contingencia...

miércoles, 28 de diciembre de 2011

lenguaje de máquinas (o de programadores de máquinas...)

da francesca


hoy, una nueva entrega de mi ciber-curso on-line de nuevas tecnologías para POF (people over fifty):


hoy fui al banco a pagar una cuenta. antes de ir, le comenté a una amiga algo así como: "uf! qué fiaca!... ahora me voy a hacer la cola del banco para pagar...".
a lo cual mi amiga, re-piola, me contestó: "ninguna cola! pagalo en las maquinitas...".
por suerte, ¡hay gente muy inteligente!


así que, partí muy contenta con el dato hacia las maquinitas del banco, de esas que operan tocando la pantalla.
cola. espero. se libera una máquina. empiezo.
aparece en pantalla este cartel: "depósitos - pagos".
y aquí viene la cuestión: tocaba y nada, tocaba y nada. me salía algo como "pago de tarjeta... " y otras cosas que nada que ver.
yo simplemente quería pagar una cuenta, para lo cual me habían dado toda la información posible: nombre del titular, número de cuenta, número de sucursal, número de CBU, número de CUIT... ¡nunca llego al banco con tantos datos correctos!


sin embargo, yo quería pagar y la máquina no me dejaba. o no me entendía. no sé bien...
entonces tuve que acudir al joven que atendía en informes. y él me solucionó en menos de 30 segundos: "marque opción "depósito" (y no "pago")".


esto es lo que pasa, que las máquinas, o los programadores de las máquinas, no perciben subjetividades: para mí, lo que yo tenía que hacer era PAGAR. 
pero para la máquina, lo que yo tenía que hacer era DEPOSITAR.


solución: consultar a los jóvenes de informes.
porque ellos son siempre PUF (people under fifty).